Jacques Rogge, presidente del COI,
anunció la decisión final de la asamblea que ha dejado a Madrid a un
paso del sueño olímpico. La candidatura española llegó a la final tras
superar dos cortes. En el segundo había caído Tokio, castigada por la proximidad de los Juegos
de Pekín. En el primero y contra todo pronóstico la candidata
descartada fue Chicago a pesar del esfuerzo final del matrimonio Obama.
Finalmente fue Río fue la seleccionada. Según informó el presidente del COI
Jacques Rogge, la candidatura de Chicago obtuvo el menor número de
votos en la primera ronda de los sufragios, que comenzaron a las 17.22
horas, en la que podían votar 95 de los 106 miembros de dicho organismo
y fueron válidos 94. En la segunda ronda de votaciones, a la que se
incorporaron los miembros estadounidenses Anita DeFrantz y James
Easton, los votos fueron 97 y los válidos, 96 pues se registró una
abstención, que acabaron con las esperanzas de Tokio, sede de los Juegos en 1964.
A
continuación comenzó la tercera y última ronda, con 99 votantes, ya que
se añadían los japoneses Chiharu Igaya y Shun Ichiro Okano, en la que
se acabó el sueño de Madrid de albergar unos Juegos por primera vez en
su historia tras no conseguirlo en 1972 y 2012. Río, la afortunada,
también había sufrido dos decepciones recientes en 2004 y 2012.
anunció la decisión final de la asamblea que ha dejado a Madrid a un
paso del sueño olímpico. La candidatura española llegó a la final tras
superar dos cortes. En el segundo había caído Tokio, castigada por la proximidad de los Juegos
de Pekín. En el primero y contra todo pronóstico la candidata
descartada fue Chicago a pesar del esfuerzo final del matrimonio Obama.
Finalmente fue Río fue la seleccionada. Según informó el presidente del COI
Jacques Rogge, la candidatura de Chicago obtuvo el menor número de
votos en la primera ronda de los sufragios, que comenzaron a las 17.22
horas, en la que podían votar 95 de los 106 miembros de dicho organismo
y fueron válidos 94. En la segunda ronda de votaciones, a la que se
incorporaron los miembros estadounidenses Anita DeFrantz y James
Easton, los votos fueron 97 y los válidos, 96 pues se registró una
abstención, que acabaron con las esperanzas de Tokio, sede de los Juegos en 1964.
A
continuación comenzó la tercera y última ronda, con 99 votantes, ya que
se añadían los japoneses Chiharu Igaya y Shun Ichiro Okano, en la que
se acabó el sueño de Madrid de albergar unos Juegos por primera vez en
su historia tras no conseguirlo en 1972 y 2012. Río, la afortunada,
también había sufrido dos decepciones recientes en 2004 y 2012.